Garliava. El 21 de febrero de 1981, el director del Colegio Secundario No. 1 de Garliava — Nauseda, habiendo hecho comparecer al alumno Vytautas Gluoksnis, se dio a interrogarlo si verdaderamente creía en Dios, si pertenecía al coro de la iglesia, si ejecutaba el órgano. Ante la afirmativa del alumno, el director le significó: "¡Está prohibido! ¡Tú eres un joven comunista!" "Puedo renunciar a la juventud comunista", — no se turbó el alumno del décimo año. El director le indicó que escribiera la nota.

El 26 de febrero V. Gluoksnis fué hecho compare­cer nuevamente. También había sido citada por la escuela la madre del alumno. El director estuvo conminando insistentemente que la madre influyera sobre su hijo, a fin de que este retirara la nota renunciando a la organización de la juventud comu­nista. Los intimidaba, diciendo que al no retirarla sería girada más arriba con lo que no ingresaría en ningún lado. En presencia de la madre motejaba a su hijo de necio, expresando que seguiría insistiendo mientras su hijo siguiera cantando y ejecutando en la iglesia.

*   *    *

El 27 de febrero de 1981 el director del Colegio Secundario de Garliava — Nauseda, hizo quedar después de clase al alumno de la clase 7, Egidijus Blockis. Estuvo interesándose si concurre a la iglesia, si ayuda a Misa. Preguntó quienes más ayudaban. El niño permanecía callado. "¿Por qué callas, te tragaste la lengua, perdiste el aliento?! ¡Igualmente lo sabemos todo, tenemos nuestros agentes dentro de la iglesia!" — reprendía el director. "Si lo sabéis todo, entonces por qué todavía lo preguntáis? — respondió Egidijus. Llegadas unas maestras ayudaron al director en el interrogatorio y la reprensión del alumno de séptimo.

*   *    *

Silale. La docente Henrika Ausriene del Colegio Secundario de Silale, ordenó a los alumnos de la clase 8 que escribieran una composición tema "Mi confe­sión".

—          Yo haré de cura párroco, — manifestó la maestra.

Enojadísima a causa de que solamente dos de todos los alumnos del grado la habían escrito, los amenazó:

—          ¡Encontraré maneras para que este tema sea escrito!

*   *    *

La maestra de la Escuela Secundaria de Silale, Stefa Statkeviciene obligó a que los alumnos del décimo grado leyeran un artículo calumniando al vicario de Silale, publicado en "Komjaunimo Tiesa" (La Verdad de la Juventud Cmunista — periódico).

Durante la clase comunicó públicamente los nombres de los alumnos que participan activamente en la vida de la Iglesia.

Pajūris (raion de Šilale). El director del colegio — Norkus, los profesores Velaviciene, Kijauskas y la jefa de los pioneros — Jakaite, aterrorizan a los alumnos de la clase VIII: Antanas Peirosius, Janina Baltikauskaite, Violeta Kučinskaite y otros a causa de que estos no se afilian a la juventud comunista. Ante los alumnos inculpan al cura párroco de Pajūris P. Vladas Abramavicius, quien — según ellos — induce a los chicos y les prohibe integrarse en las organizacio­nes ateas.

*   *    *

Didkiemis (raion de Silale). La directora de la escuela de ocho años — Kasnauskiene y la docente de la clase VIII — Elena Gudeliene, conminan a los niños para que ingresen en la juventud comunista. A los de la clase octava, que asisten a la iglesia y no se incorporan a las organizaciones ateas, los motejan groseramente de asesinos, idiotas, burlándose cruel­mente de ellos. Los niños regresan de la escuela sumamente abatidos, tanto que a veces se debe apelar a los remedios calmantes. Los padres se encuentran asaz preocupados e indignados contra este tipo de inquisición de la escuela soviética, dirigida contra sus hijos.

*   *    *

Silute. La docente E. Andriulioniene, de la clase VIIIc del Colegio Secundario No. 3 de Silute, ya es el segundo año que disminuye la calificación en conduc­ta a la alumna Roma Paulauskyte, haciéndolo este año también a la alumna Virginija Vasilauskaite. "¡No tendréis calificación de conducta ejemplar mientras sigáis asistiendo a la iglesia!" — clamaba la profesora. Así lo sostiene también el director A. Stankus.

*   *    *

La docente asusta a las niñas de que fracasarán en los exámenes y no podrán ingresar en parte alguna; además, ella les estampará una mala característica.

*    *    *

Saukenai (raion de Kelme). A principios de junio de 1979, en el stand ateísta, junto con artículos ridiculizando la fe, se exhibía una poesía religiosa, titulada "A tí, amigo mío". Varios días después, la poesía fué quitada.

El 6 de febrero de 1980, una comisión médica examinaba el estado de salud de los jóvenes de diez y seis años. Terminada su verificación, el alumno del décimo curso Alvydas Rakauskas fué requerido a un automotor estacionado en el patio y trasladado a la seccional de Seguridad de Kelme. Allí le ordenaron escribir un relato de su vida, puesto que se hallaría en conocimiento de la Seguridad. Un agente, que se presentara como Petras Tefelis, tras de interrogarle sobre sus estudios y padres, comenzó a disuadirlo de asistir a la iglesia y de servir en la Santa Misa. Tras ello, llevaron al estudiante al despacho de Petras Vytautas Brauka, jefe de la Seguridad. "¿Quién escribió la poesía "A tí, amigo mió?" — comenzó a inquirir el jefe de la Seguridad. El joven, confiando en la libertad de palabra, ni pensó en negarse.

Luego que Tefelis hubiera sacado de un armario de seguridad unas fotografías en las que figuraban varios párrafos de "Crónica de la ICL" referentes a la película cinematográfica "La procesión negra", exibi-da el 30 de enero de 1979 en la casa de la cultura de Saukenai y sobre la coacción de los estudiantes, llovió una serie de preguntas: "¿De quién era dicho trabajo? ¿Quién lo escribió? ¿Quién lo informó?"

Tras de "educarlo", le explicaron que la fe en la Unión Soviética debía desparecer. Luego los agentes de la Seguridad se dieron a exigir que Rakauskas diera a conocer los nombres de los compañeros que ayudaban en la Santa Misa y suministrara algunos otros informes. Ante su negativa, le amenazaron con la pena de lager de tres a diez años por antisovietis-mo.

El 27 de febrero de 1980, P. Tefelis volvió a presentarse en Saukenai. Tomándolo al estudiante Rakauskas, le ofreció sus servicios si este se viera envuelto en algún delito, así como le garantizó el ingreso a culesquier escuela superior . . . Claro está, solo con una pequeña condición: "Colabora con nosotros, pero ni mus a nadie. ¡Si te descubres ante alguien, te pondremos tras las rejas! Dile a tus padres que te retrasaste en la escuela. Volveremos a encontrarnos el 1 de marzo". Alvydas no concurrió a la cita.

El 18 de abril de 1980 frente a la escuela nuevamente había estacionado un automotor de la Seguridad. El director llamó a su despacho a varios alumnos. A su regreso al aula, el condiscípulo Ceponis trasmitió a Rakauskas que debía comparecer. Ante el intento de los estudiantes de intercambiar algunas palabras, el profesor Teresevicius vociferó: "¡A no contarse! ¡Vé inmediatamente!"

El de la Seguridad amenazó a Rakauskas: "Lo pasarás mal por no haber concurrido a la citación". El estudiante manifestó que jamás concurriría a tales entrevistas.

El 24 de abril de 1980, el estudiante Rakauskas en lugar de la composición ateísta defendió sus conviccio­nes religiosas.

El 5 de junio de 1980, el agente de la Seguridad Tefelis, habiendo concurrido al campamento militar en el que se encontraba el estudiante Rakauskas, explicó airadamente haberle disgustado sumamente la composición de Rakauskas. "Te espera un castigo. La composición se encuentra a consideración de la seccional de Educación de Kelme", — el chequista intentó amedrentar al estudiante del décimo año. Durante la conversación con el agente, el estudiante no contestó en absoluto a su cuestionario.

El 1 de septiembre de 1980, el chequista Tefelis, conjuntamente con su jefe Brauka, volvió a presen­tarse en la escuela. En ocasión del inicio del año lectivo, el jefe de la Seguridad habló a los estudiantes sobre el patriotismo soviético y el internacionalismo.

*   *    *

Šaukėnai. El 22 de noviembre de 1979, en el colegio secundario de Šaukėnai se encontraba de visita Stankaitis, catedrático del Instituto Pedagógico de Vilnius. Los estudiantes fueron reunidos obligatoria­mente en el salón, donde, mofándose groseramente, el lector peroró sobre los religiosos. En mitad de la disertación dos niñas se incorporaron y trataron de retirarse, empero el profesor lo impidió. Se interpu­sieron en su camino la docente Birute Rakauskiene y la jefa de pioneros Janina Jokubauskiene.

*   *    *

Taurage. En enero de 1981, en el Colegio Secunda­rio No. 5 de Taurage, la profesora Eidikyte ordenó que levantaran sus manos aquellos alumnos que creían en Dios. Luego siguieron las amenazas de que los creyentes, cual delincuentes, serían condenados a cárcel. Luego de breve intervalo volvió a ordenar que elevaron sus manos los niños creyentes. Al volver a elevarse un bosque de brazos, la maestra manifestó que todos los creyentes serían enviados al internado de estudiantes retardados de Skaudvile.

* *   *

Žarėnai (raion de Teisiai). El 30 de diciembre de 1980, la juventud de la parroquia de Zarenai, junto con otra juventud del decanato de Teisiai, se dirigió a Žemaičiu Kalvarija para hacer entrega del turno del rosario. Esto promovió una profunda inquietud entre los profesores del Colegio Secundario de Zarenai. El profesor Vasiliauskas, candidato del Partido Comu­nista, anduvo por las casas de los estudiantes amenazando que todos aquellos que viajasen a Z. Kalvarija serían castigados severamente.

    La maestra Radzevičiene, responsable por la educación ateísta de los estudiantes, la secretaria del Partido Comunista del Colegio — Damanskiene y la directora Jankauskiene, basándose en el motivo de que no ocurriera similarmente como el año anterior durante Pascua (la iglesia repleta de estudiantes), que no hubiera menester al "soviet" de juzgar a los desobedientes, decidieron el ingreso en la agrupación ateísta de la totalidad de la clase X. No lograron el ingreso del 100 por ciento. Los mencionados docentes incesantemente coaccionan a los estudiantes, los atemorizan, los "educan", los obligan a participar en concursos de ateísmo.

*   *    *

Silale. El 18 de diciembre de 1980 el organista Feliksas Kvietkauskas expresó resueltamente al vicario P. Vytautas Skiparis: "La juventud no ejecutará ni cantará en la iglesia, no te visitará, no realizaréis ninguna clase de encuentros, en general, no depredarás mucho más tiempo — pronto te encontrarás maniatado". Ante la inquisitoria del sacerdote el porque los niños no pueden cantar en la iglesia, respondió el organista que de ese modo ellos habrían de quitarle el pan. Ante la explicación del vicario que solamente a través de su cadáver resultaría posible prohibir que la juventud ejecutara, cantara y lo visitara, el organista le amenazó con delatarlo al gobierno.

*   *    *

El 23 de diciembre de 1980, la directora del Colegio Secundario de Silale — Norviliene, la maestra Breskuviene, la maestra Kelpšiene y la maestra Rastutiene, convocaron a los estudiantes: Virgis Jankauskas (clase VIII), Gintautas Račkauskas (clase IX), Arūnas Tverjonas (clase VIII). Estuvieron interrogándolos, para conocer cual de los alumnos servía en la Sta. Misa. Los alumnos se negaron a contar sobre los demás.

    Los fieles de Silale se complacen porque los niños y los jóvenes se incorporan en la vida de la Iglesia: sirven en Misa, hacen adoración, practican el Via Crucis, ejecutan música sacra y cantan en el coro de la iglesia.

*   *    *

Vadžgirys (raion de Jurbarkas). El 17 de diciembre de 1980 se realizaba en Vadžgirys el sepelio de la anciana Petronėle Liaugaudiene, de 80 años de edad. Su hija Sobaitiene estuvo trabajando largos años como mucama de limpieza en el Colegio Secundario de Vadžgirys. Gražina Sobaityte (su hija. El T.) cursa la clase IX. Participaron en el sepelio estudi­antes (Ruta Zdanavičiūte — clase XI, Sigita Eitutyte — clase XI, Janina Milkauskaite — clase XI, Regina Gudmonaite — clase XI, Laima Trumpaityte — clase XI, Audra Krikscionaityte — clase XI, Violeta Puskepalaityte — clase XI, Gudmonaite — clase IX, Daiva Mankute — clase IX, Živile Puišyte — clase V, Reda Kybartaite — clase V, Rima Giedraityte — clase V, Renato Sluoksnaitis — clase V), quienes luego de entrar en la iglesia las coronas y las flores, regresaron a las clases. La directora Butėniene observó el regreso de los estudiantes. Comenzaron los interrogatorios, las amenazas de entregarlos a la Seguridad; todos ellos debieron formular notas aclaratorias.

La profesora Zofija Maurutiene (docente de la clase XI) fué sumariada por la Seccional de Educa­ción de Jurbarkas; la profesora Lukošiene, que diera permiso a los de la clase V, fué objeto de una admonición.

*   *    *

En la Nochebuena de 1980 la propia directora E. Butėniene permaneció de guardia en el internado, a fin de que ninguno de los alumnos tratara de hacer una escapada a su hogar. "Yo disiparé todas las supersticiones de vuestras mentes. A quien pretenda escaparse se le disminuirá la calificación en conduc­ta", — amenazaba la directora E. Butėniene.