CRÓNICA DE LA IGLESIA CATÓLICA DE LITUANIA No. 7.
Llamado a los maestros para que no atropellen las convicciones religiosas de los educandos.
En 1973, 540 creyentes volvieron a dirigirse por la discriminación.
Crónica de la ICL es conocida hasta por la KGB.
Echaron de la Universidad por colocar flores ante el monumento a Vytautas el Grande.
Denuncia de 120 de Ceikiniai por atropellos a los niños.
¿La bandera de Lituania en el aniversario de Kalanta?
El P. Liesis desenmascara las infracciones de la justicia a las leyes.
Enfurecimiento de los maestros contra los alumnos creyentes.
El P. Dovydaitis desenmascara las sanciones administrativas — su injusticia e ilegalidad.
CARTA AL MAESTRO
Querido Maestro,
Ambos somos hijos de esta misma nación lituana, a los dos nos une no solamente la sangre, el idioma y la herencia cultural, sino también la preocupación por el futuro nacional. Ambos lo observamos con esperanza, preocupación y amor. Yo a mis hijos, Tú a los tuyos, a los míos y a muchos de los otros, que todos los días se reúnen en clase. De aquello que les ofreceremos a estos niños, de como los prepararemos para la vida, que clase de hombres formaremos de ellos, dependerá el porvenir de nuestra nación. Por lo tanto una de las mayores responsabilidades por su porvenir recae sobre nuestras espaldas.
(La orientación de la educación del padre: el lituano virtuoso y religioso):
Sintiendo una gran responsabilidad y conociendo perfectamente las obligaciones de padre, yo procuro inculcar a mis hijos desde pequeños, aquellos principios que les ayuden durante toda su existencia a ser hombres justos, virtusos y firmes. Esos principios los he recibido de mis padres, los he confirmado y fortalecido por la experiencia de la vida, examinado y considerado por propio entendimiento, y los he escogido de acuerdo a mi conciencia. Aquello, que considero bueno y necesario, estoy obligado en conciencia a trasmitirlo a mis hijos. Por otra parte, también poseo derecho para hacerlo. Nosotros, los padres, llamamos a los hijos a la existencia, los criamos, los vestimos, los alimentamos, los cuidamos en la enfermedad. Nadie me prohibe vestir a mis hijos con tal o cual ropa, nadie me impide alimentarlos con aquel alimento que, en mi opinión, necesita mi hijo. Por consiguiente nadie tiene derecho a prohibir, impedir o molestar la trasmisión de aquellos principios ideales y morales que, en mi convencimiento, son imprescindibles para el hombre! Yo sé que no es posible mentir, robar, engañar, matar. Este convencimiento procuro inculcarlo a mis hijos. Sé que es bueno comportarse virtuosamente, ser justo, amar al prójimo — de esto quiero convencer a mis hijos. También sé que, deseando mantenerse un hombre honorable, hay que luchar contra las propias debilidades, defectos, tentaciones exteriores. Yo preparo mis hijos para esa lucha. Y por la experiencia de la vida estoy convencido, que esa lucha se torna más fructuosa cuando el hombre siente la responsabilidad no solamente ante los hombres, sino también ante Dios, cuando está convencido que sus acciones y su comportamiento no poseen solamente un valor momentáneo, pasajero, sino también eterno, cuando obedece no solamente a las leyes, sino a la voz de su propia conciencia. Por lo tanto considero imprescindible educar religiosamente a mis hijos y no quiero que alguien se interfiera en la realización de esta obligación mía. Además, también Tú, maestro, aseguras que los padres tienen la obligación de educar a sus hijos . . .
RESPUESTA A LAS EXPOSICIONES DE LOS CREYENTES
(Después de que los creyentes se dirigieran al Ministerio de Educación y al delegado del soviet de Asuntos Religiosos sobre la discriminación de los creyentes—hubo interrogatorios y requisas con amenazas).
Raion de Panevėžys. El 6 de abril de 1973, en la aldea de Steponiskiai, llegó a lo de Julijus Rudis, el delegado Ilicevicius de la milicia de la región de Miežiškiai, la presidenta regional R. Smetoniene, los koljosistas Glebavičius y P. Drilinga del koljose "Nevezys" y un funcionario desconocido.
(Es interrogada Rudiene):
R. Smetoniene con Ilcevicius exigieron que Rudiene les entregara los escritos con las firmas (ver Crónica de la ICL, No. 6) y amenazaron: si no los entregas se te hará una requisa. Procurando evitar la requisa, Rudiene entregó las exposiciones con 40 firmas, entre las cuales figuraban las firmas de la familia Rudis. Los "visitantes" le dejaron a Rudiene una citación para que el 7 de abril concurriera al comité de seguridad de Panevėžys. Allí fué interrogada por ese mismo "desconocido", que estuvo durante la requisa. Rudiene fué interrogada sobre quien le había entregado los textos de las manifestaciones. El interrogador le explicó que todo era un desatino, puesto que dificultaba la instrucción de los niños, la intimidó con retirarle la patria potestad y entregar a los niños para que fueran educados por el Estado. Señalándole los manifiestos con las firmas, el intega-dor inquirió sobre los nombres de aquellas personas, cuyas firmas resultaban ilegibles.
Una semana después, Rudiene fué interrogada nuevamente por la seguridad, de donde había obtenido las exposiciones. El interrogador la amenazó con promoverle un juicio penal por calumniar al gobierno soviético, si Rudiene no les decía de donde había obtenido los textos de las exposiciones.
ESCRIBEN LOS CATÓLICOS DE LITUANIA
(540 creyentes se dirigieron al superior gobierno — al Presidium del Soviet Supremo de la RSSL, por esa misma discriminación que habían denunciado al Ministerio de Educación y al delegado del soviet de Asuntos Religiosos).
Al Presidium del Soviet Supremo de la RSSL
Exposición
de un grupo de creyentes
(Los procedimientos de la lucha ateísta):
Por medio de la prensa, las reuniones, en las escuelas, a través de la radio, la televisión, las películas, el teatro, se lleva a cabo una cruel propaganda antirreligiosa, que no evita el desvirtua-miento de los hechos, las acusaciones injustas, la burla y el escarnio de los creyentes. Con la cubierta de la acción antirreligiosa hasta se atreven a desacreditar a la nación. Ello se hace en el film "Herkus Mantus", donde, propagando el ateísmo se arroja una penosa acusación, no confirmada por la ciencia de la historia; los prusianos habrían quemado personas vivas en sacrificio a los dioses. Para desmerecer y devalorizar a la religión ante la vista de las personas se osa hasta la utilización de bajos procedimientos.
La religión es condenada, mientras que el ateísmo es inculcado a todos compulsoriamente. ¿Cuales son los resultados?
Lenín ha enseñado que la justicia de las ideas, de las teorías y de la ciencia, son aseveradas por la práctica. Hace casi 30 años que en Lituania, la jóven generación y toda la comunidad, es educada y predispuesta en el espíritu del ateísmo. Durante las clases en las escuelas y en todos los actos extra escolares, se propaga el ateísmo y se denigra la religión. En los stands escolares se exhiben caricaturas, que se mofan de los creyentes. Los escolares que asisten a la iglesia son interrogados, amedrentados, a veces hasta castigados, tal como se hiciera con Aurelija Racinskaite, a la cual se le rebajó la calificación en conducta, con la observación "por concurrir a la iglesia". ¿Qué demostró esta bastante prolongada práctica de educación ateísta?
ARQUIDIOCESIS DE VILNIUS
(En lugar de la Ascención — día "de la recolección de la cosecha"):
Vilnius. En agosto de 1973, el subrogante del delegado del Soviet de Asuntos Religiosos, Murnikov, notificó a los obispos y administradores de Lituania, que en el mes de agosto, a causa "de la recolección de la cosecha" estaría prohibido, en los domingos y por la Ascención (15 de agosto) conferir el sacramento de la Confirmación.
Los creyentes, ignorando la prohibición, el 15 de agosto se reunieron numerosamente en Šilale y Aluntas, y cual fué su indignación cuando, por la consabida recolección de la cosecha, no se permitió la asistencia del obispo.
El Obispo R. Krikščiūnas notificó a los sacerdotes de la diócesis de Panevėžys que, por la recolección de la cosecha, se debía posponer para más tarde las solemnidades de la festividad. Los sacerdotes festejaron la festividad igual que siempre y el gobierno no se atrevió a entrometerse.
(El delegado lee Crónica de la ICL):
El 8-V-1973, el nuevo delegado del Soviet de Asuntos Religiosos K. Tumenas, convocó a todos los obispos y administradores en funciones para el primer conocimiento. Estuvo muy amable, les prometió diversa ayuda, dar permiso para editar el catecismo, para imprimir devocionarios. Después les mostró a los asistentes el quinto número de "Crónica de la ICL", y se lamentó que esta publicación "calumniaba" la realidad soviética, está dirigida para el exterior, que los sacerdotes han metido sus uñas en ella, y que alguien tendría que pagar por eso. Otro gran "mal" en la vida de la Iglesia Católica de Lituania es la recolección de firmas al pie de diversas exposiciones.
Ideas similares, el delegado K. Tumenas desarrolló a los sacerdotes de los decanatos de Siauliai y Joniskis, que por primera vez se reunieron en postguerra en una conferencia decanal.
* * *
(Flores en el monumento de Vytautas — es delito):
Los estudiantes de la Universidad V. Kapsukas de Vilnius, habiendo organizado un viaje turístico a través de Dzukija, decidieron visitar también el monumento del gran duque Vytautas en Perloja (raion de Varena). Compraron flores y nueve de ellos partieron el 13 de mayo.
Llegados a Perloja, al pie del monumento a Vytautas dejaron las flores, pero no cantaron, ni pronunciaron discursos. Los siguió hasta allí un funcionario de la seguridad, que posteriormente llamó por teléfono a otros de las seguridad y a la milicia. Los estudiantes que regresaban, fueron detenidos en el camino y retornados a Perloja, donde iniciaron el interrogatorio. Y hete aquí el resultado: de la Universidad fueron expulsados los tres estudiantes más activos, ya sospechosos con anterioridad: Eugenijus Banys, Remigijus Kajeckas y Pranas Grigas.
Primeramente fueron expulsados del VLKJS (juventud comunista) por el quebrantamiento de la disciplina juvenil comunista, mientras que Kajeckas también por inestabilidad de opinión (durante la requisa se le halló un libro de oraciones).
Los tres fueron expulsados de la Universidad por grosero quebrantamiento de la disciplina. Sudavicius, el prorrector para cuestiones educacionales y la dirección acusaron a los estudiantes por haber llevado, sin el menor motivo, flores para el monumento a Vytautas. Ello habría sido, según la dirección de la Universidad, una velada conmemoración del aniversario de Kalanta.
(Denuncia de 120 padres por la violación de sus hijos): Ceikiniai.
Al Ministro de Educación de la RSS de
Lituania, M. Gedvilas
A la Curia de la Arquidiócesis de Vilnius
Exposición
de los padres de los alumnos de la parroquia de Ceikiniai, raion de Ignalina
El 5-IX-1972, nosotros, los creyentes de la parroquia de Ceikiniai, escribimos una exposición al Secretario General del CC del PCUS, cuya copia les enviamos también a Ustedes. El 10-X-1972, Ustedes nos escribieron la siguiente respuesta: "En respuesta a Vuestra exposición, ponemos en conocimiento que la iglesia no debe entrometerse en los asuntos de la escuela, destruir el orden establecido y obligar a los alumnos a que cumplan las ceremonias religiosas. Ministro de Educación M. Gedvilas."
Especialmente del Ministro de Educación habíamos esperado una respuesta seria. Por todos los hechos que hemos expuesto se puede percibir claramente, como los maestros y hasta el director de la sección Educación, se entromete en los asuntos internos de la Iglesia y hace caso omiso de los derechos de los padres. Y Vuestra respuesta pareciera que pretendiera acusarnos a nosotros, los damnificados.
ARQUIDIOCESIS DE KAUNAS
(El aniversario de R. Kalanta):
Kaunas. En oportunidad del aniversario de la tragedia de R. Kalanta, en Kaunas se percibía estado de beligerancia. Los milicianos proliferaban no solamente en la avenida de la Libertad, sino también en todo Kaunas. Fueron vestidos con uniforme de milicianos hasta los soldados. Los milicianos vigilaban "armados" con "bananas" y radio receptores-emisores. Se designó gente de los establecimientos y escuelas para mantener el orden en la calle. El 14 de mayo la avenida de la Libertad estaba llena de gente, empero la milicia no la dejaba estacionarse. La noche en vísperas del 14 de mayo, sobre el Comité Ejecutivo de la ciudad de Kaunas tremoló la tricolor pero fué rápidamente notada y sacada. (Esta noticia fué conocida por uno de los de la seguridad). Todas las personas que se atrevieron a colocar flores sobre la tumba de R. Kalanta, o en el lugar donde se quemó, fueron arrestadas. Cuantos arrestados hubo, no se sabe. Para conmemorar brevemente el aniversario de R. Kalanta, la juventud se concentró en el boulevard Central. El aniversario de R. Kalanta transcurrió sin incidentes especiales.
En esta oportunidad, los manifestantes fundamentales fueron los soldados y los milicianos, habiendo demostrado evidentemente como el gobierno soviético teme al pensamiento libre. En esos días, muchos estudiantes, por diversos motivos fueron llevados fuera de Kaunas. En algunos colegios las "ocupaciones" duraron desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche, para que los estudiantes no pudieran salir a la ciudad. Además, a los que concurrieron a clase el 14 de mayo se les ordenó no frecuentar la avenida de la Libertad, y hasta se les prohibió concurrir a los negocios.
DIÓCESIS DE PANEVĖŽYS
(Juicio al P. Liesis por catequizar a los niños):
Raion de Utena. Ofrecemos la exposición del P. A. Liesis al tribunal popular de Utena y su discurso de defensa, que la juez no permitió se leyera:
Al tribunal popular de raion de Utena Copias: Al Presidium de Soviet Supremo de la RSSL
Al delegado del Soviet de Asuntos Religiosos A la Curia de la Diócesis de Panevėžys
Exposición del sacerdote A. Liesis, que vive en Raion de Utena, aldea de Daunoriai
La comisión administrativa del Comité Ejecutivo del raion de Utena, el 29 de junio de 1973 constató que yo, el 12-VI-1973 estuve enseñando el catecismo a un grupo de niños en la iglesia de Daunoriai. La Comisión dictaminó que, de esa manera, yo había infringido el siguiente decreto del Presidium del Soviet Supremo de la RSSL:
"La infracción a las leyes sobre cultos religiosos, se manifiesta con las siguientes acciones: . . . organización y realización de reuniones especiales de niños y jóvenes . . . que no tengan relación con el cumplimiento del culto." (Ver decreto del 12-V-1966 del PSS de la RSSL "sobre la responsabilidad administrativa por infracción a las leyes de culto religioso").
(¿La ley prohibe las reuniones?):
Al leer este decreto del Presidium, se percibe claramente que mediante este decreto se prohibe aquellas reuniones de niños que no estén relacionadas con los actos del culto (cumplimiento). Pero aquellas, que están relacionadas con el culto, no están prohibidas.
(La lucha de la maestra contra las medallitas):
Vabalninkas. El 28-V-1973, en el Técnico, durante la clase de historia, la maestra Morkūniene, al notar sobre el cuello de Danute Kruopaite una cadenita, exigió que se la entregara. Por cuanto la niña no se la entregó, la propia maestra le quitó la cadenita con una medallita. Alguien del auditorio dijo que también
Gene Dovidonyte y Viktorija Jurginaite llevaban medallitas. Morkūniene, se acercó a Dovidonyte y le arrancó y se apoderó de la cadenita. Al notar que ella poseía otras dos medallitas más, le exigió su entrega, pero cuando la niña no se las dio, la maestra, asiéndole de la mano, se las quitó por la fuerza. Luego Morkūniene se llegó hasta Jurginaite y le arrancó la cadenita, pero no logró quitarle la medallita. Después de la lección, la maestra Morkūniene retó a las niñas porque llevaban medallitas.
Durante otra clase, Morkūniene le tomó la lección a Jurginaite. Apenas esta comenzó a dar la lección, la maestra la interrumpió, diciendo que había comenzado incorrectamente. Tomando un libro, la maestra leyó el comienzo y ordenó que lo repitiera. Al explicarle Jurginaite que ella no poseía el libro que tenía la maestra, esta le retrucó : "Si Dios te ama, el hubiera podido, plaf, arrojarte un libro así desde el cielo". La niña intentó continuar la lección, pero la maestra le manifestó: "Dios no te salvó — te pongo un dos". A todo el auditorio le resultó claro porque le había puesto un dos.
Dovidonyte le pidió a la maestra Morkūniene que le devolviera la medallita, pero esta se burló: "Me resultará una buena cosita para el museo." Preguntada la niña si seguiría llevando la medallita, respondió: "La llevé y la llevaré. Me compraré otra y me la pondré."
(Por qué se le prohiben sus deberes al sacerdote):
Sakiai. El vicario de esta parroquia P. Gvidonas Dovydaitis, el 4-V-1973 envió al subrogante del presidente del comité ejecutivo del raion de Sakiai, al jefe de la segundad y al secretario del Partido Comunista del raion, aclaraciones de este tenor:
El 24 de abril de 1973 fui citado por el comité ejecutivo del raion de Sakiai por la subrogante del presidente del raion, D. Noreikiene, quien, en compañía del jefe de la seguridad y el secretario del Partido, me reconvinieron ásperamente.
Al día siguiente fué citado por el comité ejecutivo del raion, el decano de Sakiai, P. J. Žemaitis, a quien se le ordenó que no me permitiera oficiar en Plokščiai, y además, lo amenazaron con que se me prohibiría pronunciar predicaciones.
Aunque obligado por los funcionarios del raion escribí apresuradamente una aclaración, esta no resultó completa, por lo cual deseo contestar más cabalmente a todas las acusaciones, que considero injustas.
1) Fui acusado porque en Plokščiai, durante el retiro espiritual del 16 de abril del cte. año, por la tarde les pronuncié una predicación a los concurrentes.
Por enfermedad de largo tratamiento del cura párroco de Plokščiai, P. J. Adomaitis, S.E. el Obispo J. Labukas, por nota No. 364, nos comisionó al decano de Sakiai y a mí, para que sirviera a la parroquia de Plokščiai. Por cuanto al propio cura párroco le resultaba más cómodo quedarse en su parroquia los domingos y otras festividades religiosas, entonces frecuentemente me enviaba a mí para cumplir los oficios religiosos en la iglesia dePlokščiai. Yo tenía que cumplir todas las celebraciones litúrgicas, por consiguiente también decir las predicaciones.